"¿Se llama Faustina por Sarmiento?", me preguntó el Dr. Nicolás Neuspiller mientras abría mi panza en la cesárea. Me sonreí. Sarmiento me simpatizaba un poco porque alguna vez fui maestra jardinera. "No", le contesté. "Lo leí en Bomarzo, una novela de Manuel Mujica Láinez. Una de las hijas del protagonista se llamaba así. Cuando lo leí, me encantó y lo guardé durante muchos años en la memoria".
Cuando me embaracé de mi hija casi no tuve dudas: Faustina era el nombre más lindo que podía elegir para ella.
Significa feliz, afortunada; la que trae y lleva fortuna, suerte. Ningún otro nombre hubiera ido mejor. Mi hija le hizo honor a su nombre y trajo la más grande fortuna que he tenido en la vida.
Su segundo nombre es Pilar, porque es mi sostén, la columna vertebral de mi existencia, el cimiento donde baso mi esperanza.
Me gusta llamarla Faustina, así, entero. Pero también le decimos Fausti desde que estaba en la panza, aún cuando no sabíamos que era nena, porque si era varón se iba a llamar Faustino Gael.
Como pasa siempre con los nombres, Faustina tuvo muchos detractores y algunos defensores. Antes de nacer mi hija, a muchas personas no les gustaba. Algunos ponían cara fea y decían que sonaba raro, que no lo habían escuchado nunca, que era horrible, que parecía del campo o de la "alta sociedad", y hasta de jugadora de polo! Ah, y alguien me dijo que no le gustaba solo porque empezaba con F y los nombres con esa letra eran feos!
También estaban los que se enamoraron perdidamente del nombre, de cómo sonaba, de la dulzura que inspiraba, de la fuerza que transmitía. Pero a mi no me importaba nada y por más que me dieran un listado de otros nombres para llamarla, yo ya no podía despegar su identidad del nombre que le había elegido. Hoy, de tanto nombrarla, a los que no les gustaba ya les gusta!
Por mi parte, cada vez que escucho que alguien la nombra se enciende una lucecita en mi interior que me ilumina por un ratito. Es como si miles de estrellas titilaran todas juntas adentro mío. Me encanta escuchar su nombre. Me encanta decirlo, escribirlo, pensarlo, mirarlo... Faustina, fortuna, feliz. Faustina Pilar. Te amo. Faustina.
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Hermoso nombre y hermosa ella!. Cuando venìa Charo me pasò lo mismo... muchos decìan que era un apodo y no un nombre, que cuando crezca me iba a reclamar, etc...ahora se acostumbraron, porque a cabezona nadie me gana y sòlo le puse Charo... ja
ResponderEliminarHermoso nombre lo ame desde que lo escuché... Mi hija también se llama faustina, faustina isabella!
ResponderEliminarEn mi primer embarazo escuché el nombre faustina y lo ame, cuando hicimos eco terminó siendo un niño y le pusimos francesco... El dia 16 de enero del 2015 con mi pareja nos casamos y a los dos meses nos enteramos de un nuevo embarazo, desde el momento en que supimos, dijimos que sea lo que dios quiera, pero esta vez es faustina jaja y fue asi! Mi ñiña de dos meses se llama faustina isabella!
ResponderEliminarHermoso nombre lo ame desde que lo escuché... Mi hija también se llama faustina, faustina isabella!
ResponderEliminarMe fui emocionando hasta las lágrimas mientras leía porque me pasó exactamente lo mismo con la elección del nombre de mi hija!!. Lo amé desde que lo escuché en una novela y también me emociona llamarla y escuchar que la nombren Faustina a mi hermosa bebé de 9 meses .
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